Después de la fundación de la villa en 1.331 y edificarse en ella la iglesia de San Millan, esta quedó como única parroquia. Es pobrable que al igual que la villa esta parroquia fuese de madera, hasta que se quemo completamente en el voraz incendio de 1.371 junto con su archivo con los documentos del pueblo, incluido el pergamino original de sus fueros.
El fuego ha sido decisivo para este edificación que se volvió a quemar en 1.954. solo quedaron en pie las cuatro paredes exteriores y el interior ahora es de estilo moderno, agradable y sencillo.